miércoles, 6 de junio de 2012

Ángeles de ciudad


A veces se practica, a veces se puede evitar.
El óbito de la mente, como una droga.
Fluyen las ideas como las notas de un órgano,
vacias, llenas... pero siempre constantes. 

Sabías que este día llegaría
¿De qué te sorprendes?
.

Texto y en la foto:
Irgala Miserere
 
Fotografía por:
Valerio Sorrentino 


0 Cacahuetes: